Es una pequeña continuación a mi anterior relato http://foros.comunidadzero.com/histo...verte_ver.html
"Ha pasado mucho tiempo desde la última vez que te vi, desde mi punto de vista una eternidad. Cada día que pasaba sentía como una parte de mi iba muriendo lentamente sin poder hacer nada para remediarlo. No ha habido momento que no pensara en ti, en la esperanza de volver a verte, de estar junto a ti, sentir tu perfume, notar tu cercanía.
Aún recuerdo nuestro último encuentro, como si fuera ayer. Tu cara, tu sonrisa, y los gestos que mostraste, son imágenes que nunca olvidaré, pues no deseo borrarte jamás de mi mente y mi corazón. Pienso que si en algún momento me olvidara de ti, todo lo que he sido y soy, habrá desaparecido para siempre, consiguiendo sólo ser un extraño que se limita a existir en un mundo, el cual no tendría ningún sentido sino estas tú conmigo.
Comienzo a llorar, lágrimas de tristeza pues odio que no sólo no te pueda ver siempre que quiero, sino también por que mi corazón llora por que a pesar de que siento que estas siempre conmigo, las circunstancias hacen imposible nuestra relación. Deseo con todas mis fuerzas que tú seas real, que estés junto a mí en cada momento de mi vida. Despertarme y ver tu dulce rostro con mis propios ojos, sería lo mejor y más bonito que podría ocurrirme en esta triste vida.
Te acercas lentamente hacia mi, sin dejar de dibujar esa preciosa sonrisa en tus labios, ni perder ese brillo tan especial en tus ojos, que derretiría al corazón más frío de todos. Me coges de la mano con gran suavidad, sentir tu piel junto a la mía, hace que cada célula de mi cuerpo, se llene de energía, notando dentro de mi un calor especial, como si volviera a la vida después de haber estado muerto.
Miro hacia otro lado, no quiero que me veas llorar, no podría soportar que sintieras tristeza por mí. No deseo preocuparte, pero no puedo evitar mostrar lo que siento en lo más profundo de mi ser.
Colocas tu otra mano sobre mi cara, y me la giras para que nuestras miradas se crucen. Me quedo asombrado por lo que veo en ese momento, no muestras ningún signo de sentir ningún sentimiento de preocupación por mí, todo lo contrario, tus gestos, tu expresión me indica que lo que profesas en ese momento es compasión, sientes mi dolor, mi angustia por lo delicado de nuestra situación. Eso hace que te valore más aún (si creyera que fuera posible), haciendo que llore aún mas.
- No llores por favor -.
Tu voz suena como una dulce melodía compuesta por el músico más brillante. Cada palabra que pronuncias, esta cargada de afecto, amor y entendimiento. Nunca antes he escuchado una voz igual.
Me abrazas con fuerza, como si fuera el último abrazo, consiguiendo que deje de llorar. No pienso ni digo nada, sólo quiero sentirte cerca de mí.
Siento como unas lágrimas caen sobre mi hombro, pero no hago nada, no quiero romper esa escena, este momento por el cual daría mi vida e incluso mi muerte. Se por que lloras, pues sabes mejor que yo cuando se acerca el momento de nuestra separación, y aunque no seas real, aunque de verdad no existas y seas sólo un deseo de mi mente, muestras en ese momento, ser real de verdad, demuestras tu preocupación por que todo acaba, y tienes miedo de el tiempo que permaneceremos lejos.
La superficie del lago comienza a brillar lenta pero intensamente. Llegó la hora de nuevo, antes fue el cielo, ahora es el agua, señales distintas pero con el mismo significado triste, la vuelta a la cruda realidad. Siento como tus manos me agarran con más fuerza, y ahora, en mi hombro, donde antes sentía como caían unas pequeñas lágrimas, siento como lloras desconsoladamente.
Con un gran dolor en mi corazón, te susurro al oído que nos volveremos a encontrar, que nunca nos diremos adiós, y que siempre te llevaré junto a mí.
Tu llanto cesa, te separas un poco de mi para poder verme nuevamente. Aún a pesar de que en tu rostro aún quedan lágrimas, me sonríes nuevamente.
Cierro los ojos para retener esa imagen tuya, para que nunca la olvide. Los abro nuevamente y para mi pesar, vuelvo a estar en mi habitación. Una lágrima empieza a caer por mi mejilla y entonces vuelvo a oír tu voz susurrándome “nos volveremos a ver”.
Es en este momento cuando comprendo que no todo lo real tiene que ser verdad, pues tú, en este preciso momento, me estas enseñando que sí existes, y por eso te doy las gracias".
Un saludo a todos
Ice Wolf
"Ha pasado mucho tiempo desde la última vez que te vi, desde mi punto de vista una eternidad. Cada día que pasaba sentía como una parte de mi iba muriendo lentamente sin poder hacer nada para remediarlo. No ha habido momento que no pensara en ti, en la esperanza de volver a verte, de estar junto a ti, sentir tu perfume, notar tu cercanía.
Aún recuerdo nuestro último encuentro, como si fuera ayer. Tu cara, tu sonrisa, y los gestos que mostraste, son imágenes que nunca olvidaré, pues no deseo borrarte jamás de mi mente y mi corazón. Pienso que si en algún momento me olvidara de ti, todo lo que he sido y soy, habrá desaparecido para siempre, consiguiendo sólo ser un extraño que se limita a existir en un mundo, el cual no tendría ningún sentido sino estas tú conmigo.
Comienzo a llorar, lágrimas de tristeza pues odio que no sólo no te pueda ver siempre que quiero, sino también por que mi corazón llora por que a pesar de que siento que estas siempre conmigo, las circunstancias hacen imposible nuestra relación. Deseo con todas mis fuerzas que tú seas real, que estés junto a mí en cada momento de mi vida. Despertarme y ver tu dulce rostro con mis propios ojos, sería lo mejor y más bonito que podría ocurrirme en esta triste vida.
Te acercas lentamente hacia mi, sin dejar de dibujar esa preciosa sonrisa en tus labios, ni perder ese brillo tan especial en tus ojos, que derretiría al corazón más frío de todos. Me coges de la mano con gran suavidad, sentir tu piel junto a la mía, hace que cada célula de mi cuerpo, se llene de energía, notando dentro de mi un calor especial, como si volviera a la vida después de haber estado muerto.
Miro hacia otro lado, no quiero que me veas llorar, no podría soportar que sintieras tristeza por mí. No deseo preocuparte, pero no puedo evitar mostrar lo que siento en lo más profundo de mi ser.
Colocas tu otra mano sobre mi cara, y me la giras para que nuestras miradas se crucen. Me quedo asombrado por lo que veo en ese momento, no muestras ningún signo de sentir ningún sentimiento de preocupación por mí, todo lo contrario, tus gestos, tu expresión me indica que lo que profesas en ese momento es compasión, sientes mi dolor, mi angustia por lo delicado de nuestra situación. Eso hace que te valore más aún (si creyera que fuera posible), haciendo que llore aún mas.
- No llores por favor -.
Tu voz suena como una dulce melodía compuesta por el músico más brillante. Cada palabra que pronuncias, esta cargada de afecto, amor y entendimiento. Nunca antes he escuchado una voz igual.
Me abrazas con fuerza, como si fuera el último abrazo, consiguiendo que deje de llorar. No pienso ni digo nada, sólo quiero sentirte cerca de mí.
Siento como unas lágrimas caen sobre mi hombro, pero no hago nada, no quiero romper esa escena, este momento por el cual daría mi vida e incluso mi muerte. Se por que lloras, pues sabes mejor que yo cuando se acerca el momento de nuestra separación, y aunque no seas real, aunque de verdad no existas y seas sólo un deseo de mi mente, muestras en ese momento, ser real de verdad, demuestras tu preocupación por que todo acaba, y tienes miedo de el tiempo que permaneceremos lejos.
La superficie del lago comienza a brillar lenta pero intensamente. Llegó la hora de nuevo, antes fue el cielo, ahora es el agua, señales distintas pero con el mismo significado triste, la vuelta a la cruda realidad. Siento como tus manos me agarran con más fuerza, y ahora, en mi hombro, donde antes sentía como caían unas pequeñas lágrimas, siento como lloras desconsoladamente.
Con un gran dolor en mi corazón, te susurro al oído que nos volveremos a encontrar, que nunca nos diremos adiós, y que siempre te llevaré junto a mí.
Tu llanto cesa, te separas un poco de mi para poder verme nuevamente. Aún a pesar de que en tu rostro aún quedan lágrimas, me sonríes nuevamente.
Cierro los ojos para retener esa imagen tuya, para que nunca la olvide. Los abro nuevamente y para mi pesar, vuelvo a estar en mi habitación. Una lágrima empieza a caer por mi mejilla y entonces vuelvo a oír tu voz susurrándome “nos volveremos a ver”.
Es en este momento cuando comprendo que no todo lo real tiene que ser verdad, pues tú, en este preciso momento, me estas enseñando que sí existes, y por eso te doy las gracias".
Un saludo a todos
Ice Wolf
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